Mujeres indígenas de 17 pueblos inician espacio de intercambio de conocimientos de manera virtual

La iniciativa es liderada por el Instituto Paraguayo del Indígena (INDI) junto con el Ministerio de Agricultura y Ganadería, el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Social y el Ministerio de la Mujer. Cuenta con la cooperación de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el apoyo técnico del Grupo SUNU.

El objetivo del programa es contribuir al aumento y fortalecimiento de capacidades de líderes y lideresas indígenas a través del desarrollo de conocimientos, acciones participativas y de incidencia para hacer efectivo el ejercicio pleno de sus derechos ante el Estado. En el presente año esta dirigido exclusivamente a 20 mujeres lideresas indígenas, en su modalidad virtual

Esta experiencia busca ser un espacio de intercambio de conocimientos y aprendizajes tanto entre líderes y lideresas indígenas de los 19 pueblos que habitan el país, como con representantes de las diferentes instituciones públicas del Estado. Su enfoque se basa los preceptos de los derechos humanos y pone especial énfasis en los derechos de las mujeres indígenas como importantes agentes de cambio social en sus comunidades. Al mismo tiempo de proponer el enfoque de la interculturalidad y la espiritualidad de los pueblos indígenas.

Esta iniciativa representa un desafío importante tanto para las mujeres como para las instituciones por las condiciones y el escaso acceso a la tecnología y comunicación que poseen las comunidades.

El curso de formación se estructura bajo seis ejes temáticos: i) Estado-INDI y sus funciones; ii) Gobernanza territorial y CCLPI; iii) Seguridad alimentaria; iv) Cambio climático; v) Vida libre de violencia hacia las mujeres; vi) Incidencia política. El desarrollo de los ejes temáticos plantea diferentes mecanismos de interacción; cada tendrá una duración de una semana, es decir, cinco días y considerando la cantidad de ejes temáticos serán seis semanas de duración. Cada tema constará en la semana de una Web conferencia, los lunes; mientras que los martes, miércoles y jueves serán de tutorías personalizadas para los trabajos en campo. Los viernes serán de espacio grupal de trabajo para cerrar el módulo.

Entre los años 2016 y 2017, la FAO, junto con el Foro Internacional de Mujeres Indígenas, desarrolló el Programa de Derechos Humanos, Seguridad Alimentaria y Nutrición a través de un curso de formación de 23 lideresas de las regiones Oriental y Occidental de los pueblos Mbyá Guaraní, Nivaclé, Toba Qom, Ava Guaraní, Aché, Maká y Guaraní Occidental. En ese contexto, la FAO también acompaño con el apoyo del Grupo Sunu la implementación de dos planes de incidencia que han promovido la sensibilización a nivel comunitario y a autoridades locales sobre el fortalecimiento de los alimentos tradicionales de los pueblos indígenas como estrategia para mejorar la alimentación saludable y la seguridad alimentaria.

En este marco, considerando la buena experiencia desarrollada en los encuentros de formación de los años anteriores, se ha considerado nuevamente la importancia de impulsar un espacio de intercambio de conocimiento entre líderes y lideresas. Para ello, la FAO, reconociendo la experiencia de trabajo con mujeres indígenas del Grupo Sunu nuevamente firmó una carta acuerdo para que está brinde su experiencia y acompañamiento a la iniciativa del programa de formación.

Kunumi pepy en Jaguati


Mientras damos inicio a una estación colorida y llena de esperanzas
En la comunidad Jaguati del Pueblo Paî Tavyterã realizan una de las tradiciones culturales de la espiritualidad del ser Paî. Donde traspasan el saber de la cultura a los más jóvenes para seguir sosteniendo en el tiempo el teko, la forma de vida. De esta manera se produce el resguardo de los saberes ancestrales de este pueblo.
Desde el Grupo Sunu venimos apoyando desde hace muchos años las ceremonias de estas comunidades.

Padres con el «apyka» que cada uno confeccionó para sus hijos.

En el caminar junto a los pueblos indígenas hemos mantenido viva nuestra esencia de promover la interculturalidad.

Agradecemos que nos compartan imágenes de esta festividad.
Fotos gentileza Carlos Martinez, líder comunidad Jaguati

Kunumikuera/niños a ser iniciados

LA FUERZA DE LOS PAĨ TAVYTERÃ

La fuerza del pueblo Paĩ Tavyterã no radica en las armas sino en la espiritualidad propia, compuesta por ceremonias solemnes y poderosos cantos y rezos sagrados que resguardan y cultivan desde tiempos ancestrales

El pueblo Paĩ Tavyterã, no basa su fuerza en arcos y flechas, ni en ningún otro tipo de armas que puedan dañar físicamente, sino que su resistencia se centra en sus disciplinas sagradas de danzas, cantos, rezos y ceremonias, que practican como parte de su cultura y cosmovisión propia, así como lo hacen, a su propio modo, muchos otros pueblos indígenas del Paraguay.

Abuelas y abuelos, sabias y sabios, siguen enseñando sus Ñembo’e, Mborahéi, Kotyhu, Guahu, que son algunas de las formas que toma la ancestral sabiduría que resguardan, basada en el relato del creador del mundo, Ñane Ramói Jusu Paapa, que es Dios mismo y al mismo tiempo es el primer ancestro, que es el abuelo primigenio y es a la vez su relato, que dio existencia al mundo cuando puso un pie en Jasuka Venda y cantó sus palabras sagradas.

Los sabios y sabias Paĩ Tavyterã conocen cantos devocionales, que se aplican al sostén de la humanidad en el mundo y explican las normas de la convivencia correcta, así también practican cantos para proteger los cultivos, cantos medicinales para sanar enfermedades, diversos cantos para la protección personal y comunitaria, esas son solo algunas de las facetas de una amplia tradición espiritual Paĩ Tavyterã, pueblo originario que habita en el norte de nuestro país.

Más de 500 años de invasión no han borrado de la cultura Paĩ Tavyterã su Teko Marangatu. Este pueblo ha resistido, así como lo han hecho muchos otros pueblos indígenas, al despojo territorial, a la invasión económica, de producción, de tecnologías, de mercado consumista, también invasiones religiosas o de políticos con ideologías diversas, invasión de otras lenguas y otros modos de estar en el mundo, sin embargo no han dejado de vibrar sus propios cantos y rezos, que consideran es lo que da sentido a su existencia como pueblo.

Una de las ceremonias más importantes en la transmisión del Teko de la cultura Paĩ es el Mitapepy, durante esta ceremonia, ritual de iniciación en el conocimiento de lo sagrado de los varones, el Tekoaruvicha, líder espiritual, enseña a los adolescentes iniciados el modo propio de ser Tavyterã. Los Tekoaruvicha, en cada comunidad, fortalecen a los llamados Yvyra’ija, los adeptos e iniciados, guardianes en distintos roles ceremoniales, para que colectivamente puedan sostener la sabiduría milenaria y trasmitirla de generación en generación. El Mitapepy es el momento principal del sistema educativo y religioso propio de los Paĩ.

Las mujeres, por su parte, durante el Mitapepy, son las encargadas del cuidado del entorno, de preparar el kaguĩ, la bebida sagrada y acompañar a los iniciados, y son las que conducen los ñembo’e durante el Kuñangue, cuando festejan la finalización y el desarrollo exitoso del Mitapepy.

Las mujeres Paĩ son poseedoras de gran conocimiento tradicional, que sustenta los vínculos en las comunidades, ellas también tienen sus espacios propios de aprendizajes y trasmisión de conocimientos y habilidades. Se reúnen en la ceremonia del Kuñangue Jekoaku, donde se transmiten entre generaciones de abuelas a nietas, una infinidad de aspectos relacionados al poder de las mujeres, su rol social y su relación con la biodiversidad, la nutrición y el territorio.

Desde el Grupo Sunu de acción intercultural, acompañamos a las comunidades Paĩ Tavyterã, en el devenir de su resistencia cultural y en la protección de sus saberes y sus instituciones propias.

 

Para conocer más cánticos sagrados puede accede:

 

https://audiotecapaitavyte.wixsite.com/website

 

Fotografias de:Nelson Román, Rosita Palazón y Juan Carlos Meza, en el marco del Proyecto «Salvaguardando el patrimonio cultural» ejecutado por el Grupo Sunu con el Fondo Embajador

Abandono del Estado y Violencia Estructural en Comunidades Indígenas

Ante los hechos acontecidos en el norte del país en los últimos días, desde las organizaciones miembros de la Red de Entidades Privadas al Servicio de los Pueblos Indígenas- REDESPI, manifestamos en primer lugar, nuestra plena solidaridad con las víctimas de los terribles sucesos. Tanto la muerte de las niñas, como el secuestro de Oscar Denis y Adelio Mendoza, forman parte de una violencia que rechazamos y repudiamos.

Como Red defensora de Derechos Humanos exigimos que toda intervención del Estado en la zona norte se circunscriba en el marco del respeto a las leyes que protegen a los pueblos indígenas y al respeto a la legislación nacional e internacional.

Somos organizaciones con muchas décadas de trabajo junto a las comunidades Indígenas del país y damos fe que las reivindicaciones que los pueblos indígenas han reclamado históricamente y reclaman en la actualidad no es otra sino la vigencia del Estado Social de Derecho y las garantías contempladas a su favor en el Capítulo V de la Constitución de la República, a través de organizaciones propiamente indígenas y que sus métodos de reivindicación de derechos distan mucho del ejercicio de la violencia criminal.

Sin embargo, la violencia que sí involucra a indígenas y se evidencia de manera indiscutible es la de la ausencia del Estado en las comunidades y el abandono histórico a estos Pueblos. Esto, se refleja en el hecho de que un 25% de las cerca de 800 comunidades y aldeas indígenas existentes en todo el país no cuentan con tierra propia, alrededor del 30% han sufrido o sufren atropellos de terceros – invasión, alquiler, fumigación – o violencia externa – atropello, robo, abigeato, asesinatos – y apenas el 40% del total cuenta con un centro de salud y el 70% con una escuela en sus comunidades, según señalan fuentes oficiales (DGEEC, 2015) y de otra índole (Tauli Corpuz, 2015; Villagra, 2018). Esta ausencia es aún más patente ante el escenario de la actual pandemia sanitaria, con el aumento vertiginoso de casos positivos en personas indígenas en diversas partes del país y la falta de un plan gubernamental de asistencia a pueblos indígenas ante el Covid-19.

Asimismo, resaltamos que en una zona como el norte de la región Oriental, con un alto índice de violencia, se ha abandonado a las comunidades indígenas al arbitrio de grupos criminales -muchas veces vinculados al narcotráfico y al agronegocio- que presionan sobre el territorio indígena; situación, que en muchos casos ha acabado en otras tragedias, como las – al menos – 30 personas del Pueblo Indígena Paî Tavyterâ asesinadas por sicarios desde el término de la dictadura hasta años recientes, según se puede cotejar en varios informes y estudios (Brun, Enciso y Chase-Sardi, 1990; Chase Sardi y Susnik; 1995; Tierraviva, 2014).

Por lo expuesto arriba, llamamos a abordar está exclusión y violencia con una presencia activa e integral del Estado en las comunidades indígenas a fin de revertir las difíciles condiciones de vida en la que se desenvuelven hombres, mujeres, ancianos y niños indígenas, respetando su cultura y autodeterminación, evitando una mayor criminalización hacia dichas comunidades que solamente agravaría la situación de histórica discriminación estructural.

 

Redespi hace eco de posibles casos covid-19 en comunidades indígenas

REDESPI advierte sobre el ingreso de COVID 19 a Comunidades Indígenas y falta de atención estatal
Las organizaciones integrantes de la Red de Entidades Privadas al Servicio de los Pueblos Indígenas (REDESPI) advierten que en los últimos días han recabado denuncias de líderes y referentes indígenas respecto a la existencia de casos positivos y sospechosos de COVID 19 en comunidades indígenas, tanto en la Región Oriental como en el Chaco. Según los reportes existirían casos sospechosos en 5 comunidades indígenas, sin tener datos concretos en cuanto a pacientes positivos.
La principal preocupación de las organizaciones radica en la falta de respuestas y mecanismos de abordaje adecuados por parte del Estado. Aun cuando se ha advertido permanentemente al Estado sobre la necesidad de abordar responsablemente las escasas posibilidades de las comunidades de enfrentar esta situación, ya que la gran mayoría de los establecimientos de salud a los que acuden las comunidades se encuentran desabastecidos y muchas comunidades no han accedido a información adecuada respecto a cómo actuar ante el ingreso de la COVID 19 a sus territorios.
Como ejemplo de la falta de atención a la situación en las comunidades mencionan lo que está ocurriendo en el Departamento de Presidente Hayes, donde se han registrado hasta la fecha 5 casos confirmados, en el que los pacientes fueron trasladados, después de la insistencia y reclamos de sus líderes, a más de 200 kilómetros de sus comunidades para ser atendidos en el centro asistencial más cercano. Este Departamento, el más extenso del país y con una población indígena importante, cuenta con un solo centro de atención de pacientes con Covid 19, lo que demuestra la falta de interés de las autoridades sanitarias hacia la salud de la población indígena, según indican.
A pesar de estos insistentes llamados a la acción por parte de las comunidades indígenas y de las organizaciones no gubernamentales, el Estado no ha elaborado un protocolo culturalmente pertinente que permita abordar adecuadamente la emergencia sanitaria en las comunidades. La urgencia de este protocolo radica en que debido a la realidad material y a sus formas tradicionales de vida los pueblos indígenas se encuentran mucho más vulnerables a la enfermedad; además, de que pueden convertirse potencialmente en focos de contagios masivos.
Los órganos de protección internacionales han entregado pautas claras y el Estado no ha desarrollado acciones concretas para prever lo que podría ser una tragedia, a uno de los grupos más vulnerabilizados del país como lo son los Pueblos Indígenas, como lo fueron las resoluciones 01/2020 “Pandemia y Derechos Humanos en las Américas” y 04/2020 “Derechos Humanos de las personas con COVID 19” de la CIDH.
Las organizaciones de la REDESPI se suman a los llamados de los líderes y comunidades a la auto protección, al resguardo en atención a que el Estado es totalmente negligente para enfrentar la pandemia con las poblaciones más vulnerabilizados.
Finalmente los miembros de REDESPI llaman, una vez más, a las autoridades del Estado a tomar cartas en el asunto y desarrollar acciones urgentes que puedan hacer frente a la grave amenaza que representa para los pueblos indígenas la propagación del COVID 19 en sus comunidades.

Asunción, 26 de agosto de 2020
Contactos: Salustiana Caballero, Grupo Sunu: 0982-328.087 Lidia Ruiz Cuevas, Tierraviva: 0981-427.378
Teresa Vargas, Tekoha: 0986-924.444

nota de prensa

COMUNIDADES INDÍGENAS EN DOBLE EMERGENCIA

El Estado, sin planes y con escasos recursos

En el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas (9 de agosto) y del Día del niño y la niña -en el marco del cual también es fundamental visibilizar la situación de niños y niñas indígenas-, las organizaciones abajo firmantes expresamos lo siguiente:

Paraguay y el mundo afrontan actualmente un hecho sin precedentes, ocasionado por la pandemia del virus COVID-19, ante la cual las medidas adoptadas por el Estado en la atención y contención de la propagación del virus deben tener como eje garantizar los derechos humanos de toda la población, lo cual implica garantizar condiciones de vida digna.

La situación en torno a esta pandemia puede afectar gravemente la plena vigencia de estos derechos, en virtud de los serios riesgos para la vida, salud e integridad personal que supone el COVID-19, en especial las personas y grupos en situación de especial vulnerabilidad, como es el caso de la población indígena.

Las comunidades indígenas son las más afectadas por la pobreza, y también son muy afectadas por hechos de desigualdad y discriminación: según datos oficiales al 2017, el 66,2% de las personas indígenas -siendo muchas de ellas niñas y niños- se encuentra en situación de pobreza, lo cual constituye 2 de cada 3 personas. Esto implica que unas 81.000 personas indígenas viven en situación de pobreza, y que la mitad de ellas está en la pobreza extrema, es decir el 34,4% de la población indígena. Estos datos se mantienen en estos niveles año tras año, lamentablemente.

La falta o precariedad en el acceso al agua potable y al saneamiento básico, la inseguridad alimentaria, la falta de viviendas dignas, son también problemáticas graves que afectan a las comunidades indígenas, las cuales también sufren mucha violencia, que es muy poco visibilizada. Esta violencia, por ejemplo, se pone de manifiesto claramente en la vulneración de sus tierras, en asesinatos y violaciones de niñas indígenas, y en trabajos en semiesclavitud en estancias chaqueñas.

Sin embargo, ante esta situación, observamos con suma preocupación la falta de respuesta del Estado a favor de las comunidades indígenas, que se ilustra al menos en los siguientes hechos:

1ª) la absoluta ausencia de planes efectivos de respuesta estatal para garantizar una adecuada calidad de vida a dichas comunidades. La entrega de kits de alimentos que se viene haciendo a diversas comunidades indígenas durante la presente emergencia sanitaria, no puede considerarse como un plan de contingencia. Además, el trabajo de algunas de nuestras organizaciones con las mismas comunidades indígenas, evidencia que la provisión de dichos kits es sumamente insuficiente frente a la acuciante pobreza y privación de derechos que les afectan;

2ª) la escasa asignación de presupuesto público a favor de dichas comunidades. El presupuesto del INDI en el quinquenio 2011 – 2015 estuvo entre los 104.000 y los 131.000 millones de guaraníes anuales; sin embargo en el quinquenio 2016 – 2020 el mismo estuvo entre los 65.000 y los 81.000 millones de guaraníes. Y la muy baja ejecución presupuestaria anual del INDI también es muy evidente: en el periodo 2015 – 2019, la ejecución anual promedio fue apenas de 42,8%. Es decir, además de bajo presupuesto, el INDI ejecutó menos de la mitad de los recursos que se le asignó; y también preocupa de sobremanera la escasa ejecución de los fondos que le fueron asignados para adquisición de tierras e inversión en infraestructura.

3ª) la falta de transparencia y claridad sobre la asignación de recursos en el marco de la Ley de Emergencia, en la que están enmarcados los 1.600 millones de dólares. El 10 de julio pasado, en declaraciones radiales, el Presidente del INDI expresó que dicha institución no recibió fondos de la Ley de Emergencia por el COVID-19 (ver: https://bit.ly/2YcfiGH). Es decir, que nada de los 1.600 millones de dólares fue destinado al INDI. Sin embargo, según el portal oficial Rindiendo Cuentas (www.rindiendocuentas.gov.py), el INDI recibió 2.137 millones de guaraníes (unos 310.000 dólares al cambio actual), de los cuales -según dicho sitio web- se gastaron hasta el momento 95 millones (cerca de 14.000 dólares al cambio actual), en “pasajes y viáticos”.

Además, es también importante hacer mención a lo expresado el 7 de julio pasado por el Ministro de Hacienda, de que el presupuesto nacional de los próximos tres años debe ser austero (ver: https://bit.ly/3aEaP4D). Así también, este criterio de austeridad para el diseño del Proyecto de Presupuesto General de la Nación 2021 fue mencionado nuevamente el 3 de agosto pasado por el Jefe del Gabinete Civil de la Presidencia (ver: https://bit.ly/3gcfyMe). En la práctica, lo que habitualmente sucede en escenarios de austeridad presupuestaria, es la reducción o recortes de recursos para políticas sociales. Por tanto, no es alentador el panorama que se presenta desde el Estado en relación a la posibilidad de destinar recursos necesarios para acciones orientadas a las comunidades Indígenas, cuya situación de pobreza sin dudas se profundizará durante este escenario de pandemia.

Sin planes, con escaso presupuesto, y para más en DOBLE emergencia. Sí, las comunidades indígenas están en DOBLE emergencia. Además de la actual emergencia sanitaria por el COVID-19, en junio de 2019 fue promulgada la Ley Nº 6319/19 “Que declara en situación de emergencia a las comunidades indígenas que conforman los diecinueve pueblos diseminados en varios departamentos del territorio nacional”. Esto configura claramente una situación de zozobra en la que se encuentran las comunidades indígenas. La profunda pobreza y la violación de sus derechos territoriales ilustran en gran medida esta zozobra en la cual están viviendo ya desde hace mucho tiempo. Entonces, la falta de respuesta del Estado no sólo fue evidente antes de la pandemia: sigue siendo evidente durante la pandemia.

En este contexto, desde la sociedad civil organizada hacemos un llamamiento al Estado Paraguayo sobre la necesidad de crear planes especiales para la asistencia eficaz y eficiente a las comunidades indígenas; planes que deben contar con la intervención diversos organismos estatales, en los tres niveles de gobierno (nacional, departamental y municipal). También es necesario que se superen los problemas de burocracia y escasez de recursos para llegar a todas las comunidades indígenas, garantizándoles sus derechos para una vida digna.

Con este posicionamiento, las organizaciones firmantes, nos proponemos: a) realizar un monitoreo permanente sobre las condiciones en las que las comunidades indígenas están sobrellevando la situación de doble emergencia; b) buscar canalizar las denuncias de manera proactiva hacia los diferentes estamentos del Estado; y finalmente c) incidir ante los correspondientes estamentos y autoridades estatales; para que las respuestas estén basadas, desde el respeto a las comunidades indígenas, en planes efectivos durante y post-pandemia.

19 de agosto de 2020

 

Grupo de apoyo a comunidades indígenas: 

Vocerías: Salustiana Caballero (Sunu): 0982 – 328087 / 021 – 208641; Aníbal Cabrera (CDIA): 0971 – 914 915; Enrique Gauto (Decidamos): 0981 – 415586

 

[1] Integran este Grupo: Asociación Callescuela; Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (CODEHUPY); Coordinadora por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (CDIA);Coordinadora de Mujeres Campesinas e Indígenas (Conamuri); Decidamos, Campaña por la Expresión Ciudadana; Grupo Sunu de acción intercultural; •       Pastoral Indígena de la Diócesis de Coronel Oviedo; Servicio Paz y Justicia Paraguay (SERPAJ Py)

Movilización y cierre de ruta Comunidad La Patria

Miembros y líderes de las 18 aldeas que conforman la comunidad La Patria en el distrito de Puerto Pinasco (Villa Hayes) salieron a manifestarse, cerrando la ruta como medida de fuerza.

líderes y miembros de la comunidad La Patria

¨La Patria 10 de Agosto 2020

Comunicado a la opinión pública

Los Líderes y miembros de las 18 aldeas de la comunidad La Patria

Comunica que realizo movilización cierre de ruta a la altura del km 81 en la ruta que une Salazar, Colonia Ceibo y Puerto Pinasco

 En esta movilización cierre de ruta reclamamos al estado Paraguayo:

  1. vivienda digna para los miembros de las comunidades donde están sin techo.
  2. energía eléctrica para 6 aldeas
  3. educación para todos los ciclos
  4. camino interno, puente, tubo y otros
  5. más profesionales y equipamientos en puesto Salud de La Patria¨

En comunicación con Amancio Pinasco, comparte el comunicado con los puntos que reclaman. Comentó que el 15 de abril fue la primera y última asistencia de la SEN con kits de 18 kilos en víveres para paliar la cuarentena en contexto de la pandemia covid-19, son 5 meses de la ultima asistencia

Recalca que el protocolo del INDI dice que se queden en sus casas, pero sin alimentación que harán, es por eso la medida de seguir con el cierre de ruta por término indefinido, buscan que el presidente del Indi, Edgar Olmedo y Ministro de la Sen, Joaquin Roa lleguen hasta el sitio y puedan dar respuestas a sus reclamos.

La Patria anuncia cierre de ruta

Indígenas cansados de falsas promesas anuncian movilizaciones por tiempo indefinido

La comunidad indígena “La Patria”, integrada por 18 Aldeas en el distrito de Puerto Pinasco (Pte.Hayes) en masas se movilizará con cierre de rutas desde el este 10 de agosto. Así lo decidieron los líderes reunidos en asamblea.
Reclaman a las autoridades locales, departamentales y nacionales la implementación real y efectiva de planes y programas de desarrollos para la comunidad. Exigen construcción de viviendas, acceso a agua, salud, educación, electrificación, al igual que la entrega de víveres en el marco de la pandemia por el coronavirus.
Es lo que cuenta Félix Navarro, uno de los líderes de la zona en un enlace entre la radio indígena 90.3 FM de Karoa’i (La Patria) con el programa Devuelvan Nuestra Tierra que se emite los viernes de 13:30 a 15:00 horas por Radio Pa’i Puku. Del espacio igualmente participaron los líderes Amancio Pinasco y Lino Rolon. Si no obtienen respuestas efectivas la medida de protesta continuará por varios días más, según aseguró Navarro.

Gentileza: Carlos Goncalvez

La Patria busca aplicación del protocolo de Justicia Intercultural

La Comunidad Angaite de la Patria, ha venido sufriendo desde siempre la presencia de Paraguayos (Latinos) que se aprovechan de sus necesidades básicas y realizan negocios con los líderes con muy poco beneficio para la Comunidad Indígena, es así que desde el 2012 intentan desalojar a la Familia Fleitas que se instalaron en la Comunidad, pero la Justicia por intermedio de la Fiscalía no ha podido resolver esta situación, llevan hecha tres denuncias, la última de  ellas del Presidente del INDI (2018).

Se vislumbra la anhelada justicia, intermedio del proceso iniciado con la Dirección de DDHH de la Corte Suprema que capacito a los líderes Angaite sobre el manejo del Protocolo de Justicia Intercultural, en el cual se establece que los Jueces de Paz son herramientas jurídicas y que las comunidades pueden acudir para sus problemas más urgentes.

Gracias a este instrumento el 16 de julio 2020, el Juez de Paz de Puerto Pinazco les recibió a una delegación de líderes y estos le acercaron los antecedes del caso y el mismo asevero a los Lideres que están en su legítimo derecho y que antes que termine el año se podría tener una solución.

El Grupo Sunu viene apoyando la capacitación, en conjunto con la Dirección de Derechos Humanos de la Corte Suprema de Justicia, de líderes de La Patria para la efectiva aplicación del protocolo de Justicia Intercultural.

COMUNICADO DEL GRUPO SUNU A LA OPINIÓN PÚBLICA SOBRE EXPRESIONES DEL VICE MINISTRO DE EDUCACIÓN Y CIENCIA DE PARAGUAY

El Grupo Sunu de Acción Intercultural repudia públicamente las expresiones del Viceministro de Culto del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) Fernando Griffith, en el Seminario Internacional sobre la Participación en la transformación educativa frente a nuevos contextos, organizado por el MEC y con apoyo de la Unión Europea y la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI).

En tal ocasión el Viceministro de Educación y Culto, se refirió a que el Paraguay quizá tenga una historia distinta, y que lo españoles no trajeron el genocidio, saltando ese trozo de la historia hasta ahora tan invisibilizado y suplantado con el mito del supuesto pacto de mestizaje guaraní-español. Sus palabras fueron: quizá hemos tenido una historia un poco distinta, no estoy en total acuerdo con que el genocidio lo hayan traído los españoles, eso pensamos acá, nosotros vemos que el genocidio pudo haber existido, lo vivimos nosotros incluso como nación, pero el genocidio no fue traído por los españoles si no fue traído por los propios vecinos, en un intento globalizador de someter al Paraguay, pero el Paraguay nació como un país libre, independiente, soberano (…)”  Este acto de invisibilización de la historia, de suplantación y de usurpación, está fundado en un pensamiento colonialista, nacionalista y racista, lo cual duele profundamente a los colectivos que venimos trabajando por décadas al lado de los pueblos indígenas.

Urgimos a la opinión pública a tomar conciencia sobre nuestra realidad histórica y no permitir que personas que deberían estar promoviendo la investigación y la revisión histórica tan necesaria en este país, estén al frente de la institución educativa rectora estatal. Reconocemos que precisamente, es desde la educación donde debemos formar los semilleros que apunten a un vivir mejor para todxs, reconociendo la pluriversidad cultural, biológica, individual y colectiva de todxs lxs habitantes de esta tierra.

En la misma ocasión, el viceministro ofendió a los investigadores invitados Humberto Maturana y Ximena Dávalos, poniendo en duda el trabajo científico del Dr. Humberto Maturana, además de demostrar falta de claridad en los ámbitos de la ciencia, la filosofía y la epistemología, lo cual no tiene cabida en un funcionario de tan alto rango del sector educativo. En este sentido nos adherimos al comunicado de la Sociedad Paraguaya de Filosofía (SPF) y el Centro de Investigaciones en Filosofía y Ciencias Humanas (CIF).

Instamos a la sociedad paraguaya a seguir construyendo un Paraguay diverso, participativo, buscando en su historia los orígenes de la actual injusticia social, para avanzar hacia un mundo más justo e inclusivo.

 

Asunción, 23 de junio de 2020